El
presidente Enrique Peña Nieto celebró este lunes el Día de las Madres en su
natal Estado de México, ocasión que también fue aprovechada por la esposa del
mandatario, Angélica Rivera, para volver a hablar ante el público desde el
escándalo de la llamada casa
blanca.
Ante cientos de mujeres en el municipio de Huixquilucan, Peña
inauguró un centro de salud para la mujer, y fuera del programa abrió un
espacio para que Rivera, quien también es presidenta del consejo consultivo del
DIF, ofreciera unas palabras a las madres mexiquenses.
"Ser madre es la bendición más grande que nos puede dar la
vida. Somos el pilar de nuestra familia. Las mamás realizamos un trabajo
incansable de amor y de entrega todos los días, sin esperar nada a
cambio", dijo.
"Somos amigas, maestras, compañeras de juego, doctoras.
Tenemos todas las profesiones las mamás, porque los hijos así nos la pusieron.
Y nos convertimos en todo lo que nuestros hijos necesitan de nosotras. Hay que
sentirnos muy orgullosas de ser mamás".
Antes de
los dicursos, tanto Peña como Rivera dedicaron más de 10 minutos para saludar y
tomarse selfies con
las asistentes. La esposa del presidente incluso se dedicó a tomar las
fotografías con los celulares de las mujeres que querían un recuerdo del
presidente.
En su mensaje, el mandatario agradeció a Rivera por su tarea de
ser "mamá de seis hijos", tres de su matrimonio anterior, y tres más
del de Peña. "Tres y tres pero, ya es una familia de seis", dijo
entre risas el mandatario.
Expresó el "amplio reconocimiento y gratitud" por las
madres y todo lo que hacen para sus hogares y de sus comunidades.
"Ustedes las mujeres, las mamás especialmente, son las
constructoras, son las artífices, son las pilares, son quienes van edificando,
precisamente, el país que todos queremos ver y tener. Gracias a las mamás de
México por su entrega diaria", dijo Peña. Más en www.somoselespectador.blogspot.com