En el último debate de la contienda por la Presidencia de
los Estados Unidos entre Hillary Clinton y Donald Trump, el candidato acusado
de odiar a los latinos y principalmente a los mexicanos, advirtió que los
medios de comunicación se han unido en su contra y en dicho debate advirtió
gobernar favorablemente para los estadounidenses y también para los latinos,
aseveración que pocos medios informativos retomaron con relevancia en sus
crónicas. Trump ha mostrado un discurso explosivo en contra de los emigrantes
ilegales y no de aquellos mexicanos y latinos cuya estancia en norteamérica
cumplen con la legalidad, mientras que por otra parte Hillary ha sido
abanderada como la defensora de los latinos cuando advierte una continuidad de
la política que actualmente está implantando el presidente Obama y en donde nadie
ha mencionado que ha sido este presidente de raza negra quien más mexicanos ha
expulsado de Estados Unidos en toda la historia del país gringo como tampoco se
han dejado en claro los puntos en que Hillary Clinton apoyará a los mexicanos
en caso de ganar la presidencia del país más dominante del mundo. Mientras
tanto, Hillary aprovechó para visitar a cantantes mexicanos como Vicente
Fernández para ganarse la simpatía de
los votantes latinos aprovechando que los artistas mexicanos le hacen el caldo
gordo sin que se unan para exigir los abusos de su propio gobierno cuando
México está pasando por una severa crisis económica, educacional y de seguridad
pública.
