Todavía está pendiente aquel reto entablado por Andrés Manuel López Obrador al gobernador de Veracuz; Miguel Angel Yunes Linares, en donde de demostrarle que el Presidente de MORENA es corrupto, dejaría la política pero de no ser así, que Yunes fuera quien ya no golpeara al Estado de Veracruz con más corrupción. Los días pasan y Yunes busca hasta debajo de las piedras y no encuentra nada. Muchos ya acusan al Gobernador Constitucional de Veracruz, de ser cómplice en la presentación de los vídeos y audios que han sido mostrados, en donde Eva Cadena supuestamente recibe dinero para López Obrador y que finalmente la señalada, ha declarado que en realidad fue recibido para MORENA, como lo hacen todos los partidos -es decir, incluyendo al de Yunes-. también se ha mostrado un audio en donde el hijo de Andrés Manuel tiene una conversación con la Secretaria General de MORENA, Yeidckol Polevnsky en donde obviamente hablan de ingreso económico incorrecto a MORENA pero en ninguno de los materiales se escucha la voz de Andrés Manuel López Obrador ni aparece su imagen. Por lo que Yunes no ha ganado su apuesta ante un espionaje de Estado como el que sufrió López Obrador en el sexenio foxista y que no se le pudo comprobar nada, y tuvo que ser desaforado de manera ridícula, al abrir de manera infraccionada, un camino para llegar a un Hospital. Con los recientes vídeos y audios está claro que independientemente de las investigaciones que deben realizarse de los mismos, la Procuraduría de Justicia debería pronunciarse sobre la investigación de quien ha estado recabando este material ilícito, en donde en realidad a AMLO no se le ha comprobado un acto personal y material de corrupción, pero también es real, que Andrés Manuel López Obrador ha determinado llegar a la Presidencia por el marco de la ley, pero también formando parte de los vicios partidistas, con todo lo que ésto implica.