martes, 8 de septiembre de 2015

PEÑA NIETO EN UN GRITO




















Populista es el adjetivo calificativo que más se ha utilizado para señalar al accionista político Andrés Manuel López Obrador después de haberse convertido en una verdadera obsesión para los pasados expresidentes como lo fueron tanto  Vicente Fox quien incluso ordenó su desafuero para después quedar en ridículo al no ejercer acción penal, lo que le hubiera podido provocar un juicio de desafuero, ahora en su contra, como tanto   Felipe Calderón con la misma obsesión en su mente, después de la crisis electoral por haberse adjudicado la presidencia  con ilegitimidad. En su mensaje con motivo de su tercer informe de gobierno, Enrique Peña Nieto finalizó su discurso con una larga exposición de lo que para su concepto es  EL POPULISMO y casi reprodujo aquel spot que calificaba a Andrés Manuel como un peligro para México. Sin embargo en una entrevista para la televisión mexicana, el titular del poder ejecutivo federal, aclaró que el advertir de los  que son predicadores del populismo fue un mensaje que no iba dirigido a ninguna persona en específico, ya que señaló que los populistas se pueden encontrar tanto en la izquierda como en la derecha. Así Peña Nieto ha adoptado una postura autocrítica incluyendo al pedir un perdón por los "malos entendidos" respecto a la adquisición de sus bienes patrimoniales. La aclaración del Presidente de que su mensaje no iba dirigido a nadie en particular fue oportuna, no solamente porque es sano que oculte su animadversión contra López Obrador, sino que evitó malas interpretaciones, ya que si hablamos de acciones populistas, a quien más le quedaba el saco era al actual gobernador del Estado de México Eruviel Avila y a los  secretarios y asesores del propio equipo de Enrique Peña Nieto cuyo programa social SIN HAMBRE ha sido una mala copia del populismo con que se engañó a los brasileños de que su país estaba alcanzando el primer mundo en el gobierno pasado y de que  era ejemplo de toda América, tal y como lo maquilló  de igual forma en México, Carlos Salinas de Gortari en la segunda parte de su sexenio,  Para muchos el mandato de Peña no es populista, pero lo cierto es que tampoco es popular, ante la caída del peso con el dolar de manera dramática sin que su gobierno, que según él. no es populista, reconozca una devaluación como en su oportunidad SEXENAL, lo reconoció con llanto, José López Portillo, que ante el gobierno neoliberalista actual, ahora resulta, que Portillo de ser un "saquea patrias" ahora se le mira como un saqueador  nacionalista y no  como un "vende patrias" como muchos señalan al gobierno actual. En fin, cada quien sus nominativos y definiciones, pero siempre será mejor que a un exgobernante lo califiquen con el  pecado capital de ser  "populista" y no de "ratero" como a los que actualmente gobiernan.