Hace unos años Cuba mantenía una educación atea que era la forma
en que sus ciudadanos pudieran apreciar una realidad distinta a la mayoría de
los países de América latina, el acercamiento de la isla cada vez más a Estados
Unidos en su política, con el acuerdo de su actual Presidente Raúl Castro y el mismo Fidel Castro quien calificaban como el dictador cerrado a los cambios, por lo que es un hecho que puede sorprender a
cualquiera, incluso al mismo Vicente Fox, capaz de insultar a un presidente
cubano y besar el anillo papal dejando en piso de baño,nuestra política
internacional y dejando en ridículo a nuestro país. Ahora, el Papa Francisco
visita Cuba y Estados Unidos en una misma gira e ignora las invitaciones de México, quien se las
hizo, antes que cualquier país de manera diplomática y personal por parte del
Presidente de la República. Situación que hace sospechar que México ha dejado
de ser el punto estratégico del ajedrez económico del Norte de América y que el Papa, que antes de
ser un líder religioso, también es un Jefe de Estado, reconocido por nuestro
país, no tiene interés de cocinar acuerdos con un país que está por cumplir un
año de ser el aparador de impunidad a nivel mundial, por el caso de Ayotzinapa que ha sido la
ratonera de lo que parecía una perfecta política internacional del Presidente Peña
Nieto, aún con su polémica llegada a la presidencia, situación que no sorprendió al mundo ya que éso no ha excluido a
ningún presidente priísta e incluso hasta panista como el caso de Felipe Calderón. Por lo
pronto todo es alegría en Cuba con la llegada del Papa a lo que también se unió
la presidente de argentina Cristina Fernández, y en horas, también Estados Unidos, cuando
el papa Francisco pise dicho territorio, en su gira Cuba-USA; sin México.