Pepe Meade fue el primero que evitó se pudiera desatar el tigre, y anunció su derrota electoral a la presidencia de la República ante el triunfo de Andrés Manuel López Obrador, después fue Anaya, las felñicitaciones para el ganador de los expresidentes Calderón, Salinas y Fox, la reunión con Enrique Peña Nieto y luego con la esfera empresarial, en unos días acelerados como si una mano maestra, hubiera ordenado tal desenfreno a partir de las diez de la noche del domingo uno de Julio. José Antonio Meade visitó ayer al presidente Peña con lo que el priísta puso candado a su participación por obtener lapresidencia y que lo único que obtuvo fue la derrota más escandalosa que haya tenido en la historia el partido en el poder, incluyendo aquella del año 2000 por la victoria de Vicente Fox. El Presidente Peña reconoció la actitud democrática que mostró Meade en su campaña, en donde primero no atacó a nadie, luego dijo no ser priísta, luego dijo simpatizar plenamente con el PRi, luego atacó a López Obrador y terminó en pleno pleito con Ricardo Anaya bajo la ineptitud perversa de su publicista Carlos Alazraki.