miércoles, 14 de junio de 2017

TINTA ROJA














Los medios alternativos  de contenido profundo se han convertido en un peligro importante para gobiernos corruptos y saqueadores, así como para organizaciones delincuencionales y grupos de poder que quieren  frenar la labor periodística con la presión del miedo y hasta el homicidio; tal y como ocurre en nuestro país, en donde la mayoría  de los asesinatos  a periodistas, forman parte  de un ataque a editores que los limitaban en sus espacios  y que habían podido explayarse a detalle en el internet. Los mecanismos de mordaza que eran funcionales quitando patrocinios, congelando las relaciones sociales, fabricando huelgas con grupos de choque, con la  manipulación en la distribución de papel  y el cumplimiento de leyes obsoletas a conveniencia, se han debilitado por el internet  y ahora se frenan de manera directa,   por medio de la agresión sin respetar que el periodista sea nacional o extranjero y cuyo método ha convertido a México en el país más peligroso para la expresión de las ideas mediante las letras, lo que ha extinguido el ejercicio informativo, ya que diferentes editoriales han optado por cancelar sus publicaciones ante el peligro presente y venidero . Y es que, mientras más pequeño es el medio informativo, más violenta es la manera de bloquear al mismo. Un periodista  que labora en El Universal, La jornada, El reforma,- aunque también han sufrido de agresiones y asesinatos-  no se exponen al grado extremo de aquellos quienes son independientes y cuya línea editorial no es banal sino de denuncia; ya  que exhiben la falsedad del sistema  de gobierno que está  perversamente  organizado para la manipulación mediática de las voluntades y los pensamientos; así como  el atraso cultural de la población que convierte a las mentes en agua contaminada, en donde hasta los próximos gobernantes, los aspirantes a dirigir al país, las bases partidistas y aquellos aprendices de políticos; ya entienden como un acto natural a la corrupción y en ella basan, su propósito de desarrollo profesional y económico como fuente de ése control mediático y educativo que se ha gestado podrido por las esferas de dominio y que atacan los periodistas libres,  en una lucha que muchos han calificado de peligrosamente ingenua.