La doble moral sale aún más a flote en los momentos difíciles,en donde quienes se sienten amos de la verdad y hasta santidades, dicen defender a otros pero lo que defienden son sus propios intereses sin ningún humanismo. Después de las descarnadas criticas a López-Gatell y con toda razón, por acudir a un comedor playero sin precauciones y sin la sensibilidad pública de evitar la salida a la calle como tanto pregona el Quédate en casa; ahora los restauranteros de la CDMX, pero los más poderosos no aquellos que ni siquiera tienen capacidad de agruparse para realizar una presión política, exigen se reanuden sus actividades aún con semáforo rojo y en cifras récord de contagios, e intubados y muertos en la capital del país por la pandemia del coronavirus. Señalan que los apoyos del gobierno capitalino no son suficientes y que deben abrir sus puertas, con todo y que la mayoría son lugares cerrados en donde es indispensable que los comensales se despojen del cubrebocas. Bajo el grito de "abrimos o Morimos", los que en la normalidad capitalina no quisieron acogerse a los programas asistenciales ni del gobierno de la CDMX ni del gobierno federal, con el argumento de que no estaban acostumbrados a que el gobierno los mantuviera y que describían dichos programas como clientelismo lópezobradorista, ahora no sólo reciben la ayuda sino que también quieren la apertura de sus negocios sin importarles la salud colectiva que tiene prioridad ante la subsistencia económica. Aún en una situación peor o igual que los restauranteros, -quienes pueden preparar comida para llevar-, está la industria textil, el turismo, las pequeñas compañías teatrales, las editoriales e imprentas, y muchas otras que se mantienen valientes ante esta tragedia de salud y de economía mundial. Sin embargo los artesanos, talleres familiares, microempresas, medio mayoristas y menudistas que han tenido que mantenerse con sus propias fuerzas y creatividades, antes y durante la pandemia, son patriotas que salen adelante y sin lloriquear como los grandes empresarios, que tienen recursos hasta para realizar movilizaciones doblemoralistas. La tarde de hoy, la Jefe de Gobierno,Claudia Sheinbaum, tendrá una cita con la agrupación de restauranteros machichones, que sin duda tienen derecho a exponer sus demandas individualistas. Más en www.somoselespectador.blogspot.com