Está claro que mientras una actriz fue atendida de inmediato por las autoridades, ante su denuncia de que su familiar se encontraba siendo maltratada en un asilo de ancianos, y que se inspeccionó el lugar y se permitió se violara cualquier reglamento interno y sanitario del lugar de reposo, por otra parte la autoridad investigadora se hace la desentendida, cuando un entretenedor de chismes, como Juan José Origel señala a la familia de Vicente Fernández que han sido vacunados contra el COVID19 sin esperar su turno emergente, y amenaza que el buscará a un contacto para hacer lo mismo, y en semanas muestra una imagen en donde se le aplica una vacuna. Posteriormente Origel explica que obtuvo la dosis en los Estados Unidos y no en México, mientras que los Fernández con su chayoteo periodístico, arman una cortina de humo para que se olvide lo de su vacunación con el supuesto escándalo, de que hace años, "el Chente" le tocó el seno a una admiradora, que se encontraba distraída y posando para foto con el famoso. Situación de la cual se ha disculpado el cantante por tratarse de un accidente, por medio de una entrevista con el micrófono a su servicio, que porta Mara Patricia Castañeda. Sin embargo, lo más seguro es que sí haya existido la vacunación o intento de vacunación de los Fernández según su compatiblidad médica, y que tal situación al igual que lo explicó Origel en su caso, haya ocurrido fuera de nuestro territorio, pero que su entorno, en vez de ser una especulación periodística debería concretarse en una investigación oficiosa ministerial como las que se han abierto, ante abusivos médicos que sin tener la especialidad de riesgo, se han aplicado la dosis anticovid y que también la han hurtado en favor de su familia. Todos estos actos tan vergonzosos, muestran la bajeza de quienes se dicen comunicadores de prestigio y supuestos ídolos del pueblo, pero la realidad es que son ignorantes antipatriotas cuya fama ha sido producto de la circunstancia de haberse dedicado al mundo del espectáculo dentro de un país sumamente ignorante, de estructura atrasada como producto del abuso de gobierno basado en una semidictadura corruptora y con una enorme inoperabilidad en la investigación y persecución de la acción delictuosa, cuya responsabilidad policíaca, ministerial y judicial sigue estando al entero servicio del mejor postor, ya sea en omisión o en comisión de las acciones correspondientes.Más en www.somoselespectador.blogspot.com