domingo, 23 de agosto de 2015

LA BRILLANTEZ DE ALEJANDRA BARRALES EN EL OPACO GOBIERNO MANCERISTA, LA PONE EN ZONA DE RIESGO













nUEVAMENTE Ale Barrales vuelve a ser capitán emergente para salvar las tonterias de Miguel Angel Mancera y ahora acepta el más alto reto de su carrera política, pertenecer  al gobierno decadente de la Ciudad de México y ser parte del peor mandatario de la Ciudad en toda su historia, como lo es Miguel Angel Mancera y ser secretaria de Educación en un gobierno local y federal en donde lo que menos importa es educar. María Alejandra Barrales  Magdaleno, nueva  titular de la Secretaría de Educación del Distrito Federal (Sedu) tiene la responsabilidad de elaborar proyectos y  dar seguimiento a los programas que tengan a bien las mejoras educativas en la ciudad de México, pero además, dar cumplimiento a las reformas en  la materia que ha llevado a cabo el Gobierno Federal tales como: la Ley General de Educación, la nueva Ley General del Servicio Profesional Docente y la Ley del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación en donde de acuerdo con un estudio de enero 2015 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el logro académico en México se cuenta entre los más bajos de los países que integran el organismo, poniendo especial énfasis en que el acceso a  una educación de calidad está asociado al estatus socioeconómico de la familia. Barrales llega como bombera para brindar otra imagen de un gobierno Mancerista que se niega a pedir disculpas por sus malos manejos como ya lo hizo el mismo titular del ejecutivo federal y a reconocer su caída reflejada en las victorias electorales de MORENA en la capital, por arriba del PRD con mucho mayor años de historia; así como las victorias en la capital del PAN y el PRI, nunca antes vistas en una votación intermedia de un gobierno perredista. Alejandra Barrales quien criticó el absurdo aumento del metro por parte de Mancera, y quien es de las políticas más brillantes en la actualidad, ahora forma parte de su gabinete  y de paso, poder limpiar la imagen de un gobierno nefasto para la ciudad.