La tarifa de cinco pesos que cuesta el boleto del Metro no alcanza para los gastos de su operación y mantenimiento, reconoció el director del Sistema de Transporte Colectivo Metro, Jorge Gaviño Ambriz, respecto a un transporte que tiene ingresos diarios por parte de 5 millones de personas que lo abordan. Y es que detrás del mal manejo del metro de Joel Ortega y ahora de las excusas de Gaviño Ambriz está la sonriente y cobarde sonrisa del Jefe de Gobierno Miguel Angel Mancera quien ha sido cómplice del evidente saqueo, en sobre contratación de policías, eliminación de comercios que aportaban ingresos al metro, falta de mantenimiento que ha puesto en riesgo a trabajadores, programas de ayuda que incluyó a vendedores ambulantes, premiando a lo prohibido y cuyos fondos no se sabe dónde están y que en su nueva auditoria al asumir Gaviño, la jefatura, no ha reportado ningún faltante. Sin embargó el nuevo Director del metro anunció que Mancera contará con una caja chica permanente, ya que ahora resulta, que la Línea Dorada es irreparable, por lo que se tendrá un mantenimiento especial con factura para los capitalinos, por lo que el nuevo Director hasta propuso tarifas del metro de diferentes costos para cada ciudadano según su economía, como resultado, seguramente de un estudio socioeconómico parecido a aquel cuyo resultado fue que la gran mayoría de los usuarios deseaban el aumento del metro. Y Mancera que prometió en su campaña política para la Jefatura de gobierno no subir un solo centavo al metro y por el contrario aumentar sus líneas, ahora como ejecutivo local , sólo promete ya no volverlo a aumentar y dejar funcionando parte de la línea doce, en donde su gobierno insinúa que el culpable de su mal funcionamiento es el gobierno de Marcelo Ebrard, cuando en el caso sin conceder de que así sea, Mancera ocultó desde tomar cargo de la Ciudad tal situación y en cambio subió el costo del metro, argumentando haber realizado un estricto inventario, avalúo y revisión de todo su funcionamiento. Bueno pues resulta que ahora, Gaviño es la nueva tapadera de Mancera como lo fue Joel Ortega, aunque con la diferencia de que Jorge Gaviño tiene mayor influencia en partidos disque de oposición, aunque más bien ha resultado jinete de elefantes blancos como PROFECO y subdirecciones en Lotería Nacional.