lunes, 19 de febrero de 2018

ALEJANDRA BARRALES EN UNA TOMBOLA
















Si no es una tómbola por lo menos si es una ruleta rusa, lograr ser candidata a la jefatura de la CDMX, violando los principios propios y de un partido, aprovechando la debilidad  cascarónica del mismo y lograr una ambición, sumándose a las conductas antiéticas de personajes como Ricardo Anaya y Miguel Angel Mancera. Alejanadra Barrales Luego de rendir protesta como candidata del PRD a la jefatura de Gobierno,  consideró que están dadas todas las condiciones para volver a ganar la Ciudad de Mexico, pues al PRD se le sumaron no sólo el PAN y Movimiento Ciudadano, sino los habitantes de esta capital, con lo que se conforma una fuerza todavía más poderosa y aseguró que el ser candidata de estos tres partidos, es resultado de sus aportaciones y esfuerzos  que le ha brindado a la capital del País y no un boleto ganado en la tómbola. Con el autoengaño, Barrales se mostró como la salvadora de los capitalinos de las garras del actual gobierno que ella también defiende y que formó parte como Secretaria de Educación y Turismo.  Sin embargo oculta con facilidad, lo que ella perfectamente sabe, que alzó pesas para  llegar a la boleta electoral,  en un  comerciar de puestos para colocarse como candidata perrepanista única, ante la falsa de tener precandidatos oponentes. Y así, ella llega como candidata por el PAN a la jefatura capitalina, mientras que Anaya por el PRD a la presidenciable y Mancera al Senado por el PAN.  Con estas condiciones, ¿quién les compraría un boleto para su  amañada tómbola?.