- No hay navidad sin Raphael, ni joven rebelde de pelo largo contraneoliberalista que no escuche temas del recuerdo de Serrat. México en los años ochentas fue el principal testigo de que los maestros de la balada romántica son los españoles, por sus grandes compositores y sus grandes intérpretes. Aquellos que conquistaron Europa y toda América por medio de la puerta mexicana, han muerto como el domingo después de los partidos de fútbol de vida en casa como los nombraba José Luis Perales. Pero los grandes pilares de la balada romántica hispana, salvo Camilo Sesto, como Raphael, Julio Iglesias, el propio Perales, Serrat y Miguel Bose, siguen vivos tanto físicamente como musicalmente con todo y las nuevas corrientes homogenantes de la música para esta nueva era. Buen vino, y una USB en vez del tocadiscos, para seguir brindando y para seguir escuchándolos tanto o más que en el otro siglo. Más en www.somoselespectador.blogspot.com