Una gran mayoría de las mujeres que vive en la Ciudad de México denuncia haber sufrido algún tipo de violencia sexual, un 72%, según las cifras que maneja el Instituto Nacional de Estadística (INEGI). Esto es más que la media nacional y supera a los Estados más violentos del país, como Guerrero o Chihuahua. Y la violencia se ceba con las más jóvenes, como Noel. En esos casos la cifra de abusos aumenta hasta 78 de cada 100 mujeres entre 20 y 29 años."Lo que me hizo ese tipo ni siquiera es lo más fuerte que me ha pasado esta semana", sentencia firme una dama desde el otro lado del teléfono. Un día después de lo sucedido, aún sigue enfadada. Recuerda que esa tarde, cuando fue a poner la denuncia, había otras chicas que habían sufrido agresiones "mucho más graves" y no recibieron el mismo trato: "Junto a mí había chicas llorando. Me pareció muy absurdo que dedicaran tanto tiempo y tantas personas en atenderme cuando había otras con problemas más serios. Lo mío había sido de lo más frívolo, pero había tenido éxito en las redes sociales", cuenta indignada. La falta de valores, respeto y composición es consecuencia de un plan de Estado que considera que invertir en educación, arte y conocimiento es tirar presupuesto a la basura y otorgar herramientas de vida a sus ciudadanos que son más controlados cuando su pensamiento es primitivo, actitud ciudadana que se presenta en la CDMX ante dos gobiernos, uno federal y el otro local, que son ineptos y caducos.