El peor enemigo de los animales es el ser humano, a pesar de
ser la especie más racional, es capaz de acabar con su propio entorno. Especies
marinas y terrestres se enfrentan al asesino y sus desechos que resultan igual de
peligrosos. Aunque no todo está perdido en la especie humana, debemos reconocer
que de manera directa o indirecta hemos sido el mayor peligro para otras
especies. Más en www.somoselespectador.blogspot.com