Donald Trump viajará a México para reunirse en privado con el presidente Enrique Peña Nieto en México, en LO QUE HA CAUSADO DISGUSTO en los ciudadanos y hasta columnistas políticos que según defienden la no intervención de la política de otros países. El gobierno mexicano debe recibir a cualquier visitante que así lo requiera sin embargo tampoco se puede negar que el gobierno mexicano había insinuado una molestia hacía el candidato estadounidense por sus comentarios que muchos tachan de racistas. Para trump será muy benéfico este viaje para su candidatura para la presidencia de los Estados Unidos ya que podrá hablar sobre las políticas migratorias luego de qué él y sus aliados enviaran señales mixtas sobre si suavizará sus posturas o no ya que cuando anunció su intención de competir por la presidencia de Estados Unidos el año pasado dijo que México enviaba “violadores” a ese país. Mientras tanto Peña Nieto ha dicho que México no pagará el muro fronterizo propuesto por Trump. La reunión ayudará a la imagen de Trump para que sea más "presidenciable" y no dañará la imagen del gobierno mexicano quien debe estar abierto a cualquier tipo de diálogo y más si la conversación puede venir de un futuro Jefe de Estado. En ese sentido, el titular de Hacienda de México, Luis Videgaray, calificó como de "hombre de Estado" la decisión del presidente Enrique Peña Nieto de invitar a México al candidato republicano.“Puede haber diferencias, pero la amistad, el intercambio y la relación comercial exige que tengamos un diálogo y una forma de construir juntos”, dijo.Agregó que “el hecho de que alguno de los candidatos haya aceptado la invitación es ya un hecho sin precedente, y es un mensaje muy importante, porque México es muy importante para todos". Por lo que de esta manera, cada quien está jugando sus cartas políticas, en una reunión que esta diseñada para tener estos tintes aunque muchos mexicanos son escépticos respecto a que recibir a Trump sea una buena idea y que señalan una visita riesgosa tal como lo señaló Andrés Rozental, exsubsecretario de relaciones Exteriores en el sexenio salinista quien indicó: “Creo que es algo sumamente riesgoso que fácilmente puede volverse en contra de Peña Nieto. Puede fortalecer a Trump si la campaña de Trump lo presenta de manera correcta. No veo qué ventaja pueden sacar Peña Nieto o México de esto”.